Gonzales y la “Fuerza de Erección Inmediata”
Documentos producidos recientemente por la Prensa Asociada sacan a luz nuevos métodos de tortura utilizados en Guantánamo que Bush como presidente tendría libertad de usar según la opinión de nuestro conocido orgullo Hispano e ilustre miembro de “torturadores anónimos” (o “torturadores reformados” según su versión al Congreso) Alberto Gonzales.
Aparentemente Bush (y su carnal Rumsfeld) tendrían también la libertad de dar rienda suelta a sus instintos mas perversos y usar mujeres, algunas de ellas prostitutas para…
…“controlar” a prisioneros problemáticos y para “debilitar” al enemigo durante interrogatorios.
En Guantánamo, en donde 20% de los guardias son de sexo femenino, los militares habrían formado una “Fuerza de Reacción Inmediata” compuesta exclusivamente de mujeres que estarían a cargo de imponer el orden entre los prisioneros.
En la religión musulmana está estrictamente prohibido todo tipo de contacto físico entre un hombre y una mujer que no sea la esposa de éste hombre o miembro de su familia. De igual manera, no debe existir contacto físico con una mujer durante su menstruación por considerarse que en éste período la mujer “no está limpia”.
Se relata el caso de una sargento del Ejército estadounidense que le tocaba los genitales y humillaba sexualmente a un prisionero esposado durante el Ramadán.
Otra mujer interrogaba a los prisioneros en medio de la noche vistiendo una minifalda y con una tanga de ropa interior.
Una interrogadora se quitó la camisa y quedó sólo en una ajustada T-shirt mientras le pasaba la mano por el cabello al prisionero y se sentaba en sus faldas. Esta mujer que estaba interrogando a un árabe de 21 años de edad dijo que quería “romper la voluntad” del prisionero, y continuó provocándolo sexualmente acariciandose los pechos delante de él y luego frotándolos en su espalda mientras hacía comentarios acerca de la obvia erección del prisionero.
En otra ocasión una mujer aparentó ensuciar a un prisionero con la sangre de su menstruación tocándose los genitales y pasándole la mano manchada de colorante rojo por la cara.
El prisionero empezó a gritar a toda voz, escupió a la mujer y después se puso a llorar como un niño mientras la interrogadora salía del cuarto diciéndole que “pasara una noche divertida en su celda sin agua para limpiarse la sangre”.
Estos y varios otros incidentes similares de humillación sexual de prisioneros por mujeres en Guantánamo por la que mejor podría llamarse “Fuerza de Erección Inmediata” fueron descritos por el sargento del ejército Erik R. Saar a la Prensa Asociada.
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