No es la primera vez que Israel comete atrocidades genocidas en el pueblo de Qana en el Líbano. Tampoco es la primera vez que estos crímenes de guerra son ejecutados con armamento otorgado por los EEUU en esa complicidad infame que caracteriza a las relaciones entre estos dos países.
Hace un par de días los israelíes bombardearon y destruyeron un edificio en la ciudad de Qana que albergaba a civiles que se refugiaban de los ataques indiscriminados y criminales lanzados contra el Líbano. En el ataque murieron al menos 54 civiles, 37 de los cuales eran niños.
Esto ocurría tan sólo un par de días después de que Israel deliberadamente bombardeara estaciones de observación de las Naciones Unidas matando a 6 oficiales de esa organización.
Uno podría pensar que todo esto fue el resultado de accidentes...
...desafortunados, de bombas "inteligentes" y de "precisión" que súbitamente dejaron de serlo.
Pero si uno recuerda el pasado, es obvio que no son accidentes, y que por el contrario reflejan un patrón repetido en el afán de Israel de derrotar a sus enemigos mediante el uso de masacres indiscriminadas de civiles y la limpieza étnica de Shitas del sur de Líbano.
El plan israelí es simple: aterrorizar a la población civil del sur del Líbano para que huya de esa región o muera en el intento. El fin es intentar aislar a Hezbollah.
Hace 10 años, más de 100 libaneses refugiados en un campamento de las Naciones Unidas en Qana, la mayoría mujeres y niños, fueron masacrados por los israelíes con fuego de artillería. El renombrado periodista y corresponsal británico Robert Fisk fue testigo presencial de la matanza y describió los hechos en detalle en un artículo que el día de hoy suena trágicamente familiar.
Las acciones criminales de Israel en ese entonces causaron una ola de protestas alrededor del mundo y la presión internacional forzó a los israelíes a detener sus ataques.
Al igual que hoy, en ese entonces los EEUU dieron su apoyo tácito a las acciones criminales de los israelíes y finalmente fueron hechos como los de Qana los que forzaron a los gobernantes estadounidenses a retirar su apoyo abierto a Israel aparentando así una posición de moralidad más por conveniencia que por otra cosa.
Un caso similar podría estar sucediendo hoy como resultado de esta nueva masacre en Qana.
Reacciones de la prensa mundial
Ante las crecientes protestas de la comunidad internacional y no pudiendo escapar a la realidad de los crímenes que las imágenes muestran gráficamente en todos los rincones del mundo, los gobiernos de EEUU y Gran Bretaña nuevamente se estarían viendo forzados a aparentar esa moralidad por conveniencia, que hoy en día todo el mundo reconoce por lo que realmente es, y estarían "trabajando" para conseguir un alto al fuego "lo antes posible".
El plan genocida y de limpieza étnica israelí ha producido 750,000 refugiados libaneses que viven y mueren en las peores condiciones.
Sin embargo este plan no funcionó en el pasado en debilitar a Hezbollah y tampoco lo hará esta vez. La resistencia militar ofrecida por Hezbollah sorprendió enormemente a los israelíes, y la respuesta en el Líbano y en el mundo árabe a los crímenes de guerra israelíes ha sido por el contrario la de unirse en torno a Hezbollah haciendo que esta organización se fortalezca aún más.
Como dije anteriormente, cuando Al-Qaeda, Hamas, Hezbollah y otros grupos matan a niños y mujeres inocentes, los EEUU y muchos países occidentales lo llaman "terrorismo".
Yo, además de terrorismo, lo llamaría barbarismo, homicidio cobarde, salvajismo y muchos otros nombres y adjetivos que de seguro no podrían ni acercarse a definir esos actos salvajes o a ponerlos en su verdadera dimensión.
Personalmente sin embargo, yo no veo ninguna diferencia entre este terrorismo y el que hoy comete impunemente Israel con el apoyo abierto de los EEUU y el apoyo menos abierto de otros países occidentales.