Planes para la construcción del gasoducto que atravesará Sudamérica de norte a sur fueron solidificados en una reunión de altos funcionarios de los gobiernos de Argentina, Brasil y Venezuela ocurrida en Caracas.

Según el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez…

“La decisión política de construir el gasoducto está tomada y ahora se están decidiendo los detalles técnicos.”

El gasoducto tendrá una extensión de 8.000 kilómetros, proveerá de gas a gran parte de la región y cruzará el Amazonas y su costo se estima en 20.000 millones de dólares.

Ramírez afirmó que

“Es un proyecto que va a estructurar la integración de América del Sur desde el Caribe venezolano hasta la Patagonia argentina.”

La predicción es que los países de América del Sur seguirán profundizando su necesidad de gas, no sólo para uso industrial y generación de energía sino también para uso doméstico.

Por lo tanto, países como Argentina, Brasil y Chile necesitarán cada vez más gas, que les proveerán los dos países productores de gas por excelencia: Venezuela y Bolivia.