¿Recuerdan al ex-cabildero Jack Abramoff, el acusado de corrupción de oficiales públicos (congresistas republicanos) que fuera condenado a cárcel por estos delitos?
Resulta que estos días Abramoff pasa alrededor de 4 horas diarias en las oficinas del FBI prestando declaraciones a las autoridades y colaborando en la investigación de otros congresistas republicanos comprometidos en el escándalo.
La investigación continúa ampliándose y según el FBI Abramoff pasa tanto tiempo en la agencia proporcionando información que estos le han proporcionado su espacio propio con escritorio para que trabaje con comodidad.
Inclusive el FBI confía poder mantenerlo en una prisión cercana después de que le den su sentencia.
La cultura de corrupción republicana es interminable.