Mientras la prensa tradicional estadounidense reportaba que el apurado viaje de pocas horas que hizo el vicepresidente Cheney a Arabia Saudita durante el fin de semana no era más que una visita amigable para pedirle ayuda a sus aliados Sauditas para solucionar el desastre que es Irak, fuentes cercanas al gobierno han desmentido ésta versión del viaje.
Según el Washington Post, el Asia Times y otras fuentes fidedignas, el gobierno de Arabia Saudita está tan preocupado por el daño que el conflicto en Irak está causando a toda la región…
…que básicamente “ordenó” a Cheney a realizar un viaje intempestivo para llevar a cabo conversaciones de urgencia con los Sauditas.
Arabia Saudita está especialmente preocupada por el rápido ascenso en la influencia iraní en Irak desde la invasión estadounidense.
La guerra civil en Irak amenaza tan seriamente la estabilidad de la región que Estados Unidos se podría ver forzado a negociar con Irán para que éste país ayude a parar las matanzas. Esto a su vez le daría a Irán una posición central como poder regional en el Golfo Pérsico y el medio Oriente, lo cual por supuesto no le gusta nada a los Sauditas.
Y ustedes se preguntan cómo pueden los Saudis “ordenarle” algo a los estadounidenses. No se olviden que Bu$hCo gobierna para el imperio de las grandes compañías petroleras del mundo y que Arabia Saudita es la mejor amiga de esas petroleras en la región.