Sin duda alguna que el informe recientemente filtrado del Comité Internacional de la Cruz Roja sobre los crímenes de guerra cometidos en Guantánamo, Irak, Afganistán, y en las prisiones secretas de la CIA figuraría de manera prominente como evidencia en dicho juicio.
La cantidad de evidencia de crímenes de guerra recopilada por organizaciones de derechos humanos, incluyendo una rama del Parlamento Europeo, y recogida también en muchos libros es simplemente abrumadora.
Hace un par de semanas la periodista Jane Mayer de la revista The New Yorker publicó un artículo llamado “Los Sitios Negros” (The Black Sites).
En este reportaje Mayer describe el contenido de entrevistas que la Cruz Roja hizo a ex-prisioneros de las prisiones secretas de la CIA. Mayer revela también los efectos que el acto de torturar tiene sobre los mismos torturadores quienes, bajo órdenes del presidente, ,torturan para “proteger los vaores Americanos”.
Según aquellos que participaron en las torturas, “Una vez que uno cruza esa línea de oscuridad, es difícil regresar. Uno pierde su alma”.
Les recomiendo que lean todo el artículo. Es difícil de creer que un país llamado “civilizado” haya llegado a un nivel de inmoralidad tan bajo.