Este gráfico, aunque no es de la mejor calidad, ejemplifica de manera muy clara cual es el problema con el Congreso, sea con mayoría demócrata o republicana.
El gráfico muestra las contribuciones hechas por los empleados de la compañía de telecomunicaciones AT&T al jefe del Comité de Inteligencia del Senado, el demócrata Jay Rockefeller.
Este comité es el que está considerando una propuesta para legalizar el espionaje doméstico ilegal y de paso inmunizar a las compañías de telecomunicaciones contra toda responsabilidad legal por su participación en este espionaje ilegal, que dicho sea de paso les ha resultado en millones de dólares en ganancias pagadas por el gobierno con el dinero de los contribuyentes.
Como se puede ver en el gráfico, hasta el año 2006 en que los demócratas eran minoría las contribuciones de las telecoms a Rockefeller eran casi inexistentes. Sin embargo a partir del 2006 y en el 2007 cuando este senador se convirtió en jefe del Comité de Inteligencia, y por lo tanto en figura crucial en la decisión de inmunizar a las compañías de telecomunicaciones, las contribuciones de éstas aumentaron de manera explosiva.
No extraña por lo tanto que ahora Rockefeller y otros demócratas están que se pelean entre ellos…
…para ver quien es visto como el salvador de las telecoms.
El espionaje doméstico es una violación grave de la Cuarta Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos que dice textualmente:
El derecho de los habitantes de que sus personas, domicilios, papeles y efectos se hallen a salvo de pesquisas y aprehensiones arbitrarias, será inviolable, y no se expedirán al efecto mandamientos que no se apoyen en un motivo verosímil, estén corroborados mediante juramento o protesta y describan con particularidad el lugar que deba ser registrado y las personas o cosas que han de ser detenidas o embargadas.
O sea que si el gobierno quiere espiar lo que haces, con quién hablas y a quién le escribes, o si quiere rebuscar tu domicilio, papeles y efectos personales necesita en cada caso una orden judicial específica e individualizada. Y las compañías de telecomunicaciones como Verizon, AT&T y otras tienen la obligación de cumplir la ley.
Bueno, ésto era en teoría ya que el gobierno y las telecoms han estado violando esta enmienda desde que Bush subió al poder.
La gran pregunta es si el Congreso demócrata va a aprobar la propuesta de ley que legaliza el espionaje doméstico y de paso eliminar por completo la Cuarta Enmienda.
Porque en el caso de la compra de congresistas por las grandes corporaciones, no hay ninguna duda que aunque ahora los demócratas son la mayoría, todo sigue como si nada hubiera pasado.
Con demócratas o republicanos las cosas siguen siendo como se dice por acá “Business as Usual”.