Un par de semanas después de hacer una conferencia de prensa, en la que nadie se acuerda de lo que dijo, porque fue al frente de un cementerio, el ex líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Denny Hastert, llegó a su propio cementerio político.
En las elecciones internas del liderezgo republicano (realizada por congresistas republicanos) no quedó líder de nada en la ahora minoría republicana.
Mientras que los dos congresistas que le seguían en jerarquía fueron reelectos, Hastert ya no figura para nada, y parecen que no lo quieren ni de barrendero en el Capitolio…Otra víctima electoral que no nos hará falta a los blogueros…