Estoy pasando unos días de vacaciones en el Golfo de México, Okaloosa Island en Florida para ser más exacto. Por lo tanto mis posts serán muy ocasionales durante el siguiente par de semanas.

Como ya sabrán los demócratas en el Congreso autorizaron hace un par de días a Bush a realizar espionaje electrónico doméstico sin necesitar supervisión de las cortes. Por lo tanto ya es poco o nada lo que queda por defenderse en términos de libertades individuales en este país.

Nos hemos convertido en una dictadura más como muchas otras anteriormente en nuestro continente en donde el presidente tiene poderes absolutos y manda por decreto ejecutivo.

El Congreso se fue de vacaciones y lo mejor que puede hacer ahora es quedarse en sus casas y renunciar a sus salarios porque hace un par de días abdicaron definitivamente su papel de representantes del pueblo y de las libertades fundamentales sobre las que se creó este país.

Me voy a la playa a dedicarme un poco a descansar y a la pesca, y a dejar de preocuparme en lo que estos inútiles hacen en Washington.

Hasta la vuelta.

Mientras el Pentágono continúa “extraviando” cantidades obscenas de dinero, nos enteramos que el gobierno de Bush está gastando cantidades record en programas secretos como operaciones de espionaje (tanto externas como domésticas), satélites de vigilancia y armas secretas.

Se calcula que este año el gasto en programas clasificados será de 31 mil millones de dólares.

Este llamado “presupuesto negro” financia a la CIA, la Agencia de Seguridad Nacional y otras agencias de inteligencia y de defensa.

Esta parece ser la reacción de uno de los principales diarios del país, el Washington Post, y docenas de comentaristas políticos que han hecho del escote de la candidata Hillary Clinton una cuestión de estado.

En el colmo de la ridiculez, y en momentos en que cientos de soldados e inocentes iraquies mueren en una guerra basada en mentiras, en que estamos bajo la casi dictadura de la administración más incompetente y corrupta de la historia, en que todas las agencias del gobierno están siendo politizadas para beneficio de Bush y sus secuaces, y en que los niveles de pobreza alcanzan niveles obscenos en el país más rico del mundo, el Washington Post no tiene nada más pertinente que reportar que…. “el escote de Hillary”.

Y hoy domingo, los llamados “expertos” en los programas políticos noticiosos parecen también haberse dado cuenta que el candidato presidencial que lleva hasta ahora las preferencias de los votantes tiene, nada menos que…..(gasp!!!)…..TETAS.

Y dicho sea de paso, no solo es un asunto que carece totalmente de importancia sino que además, viendo la foto usada por el Washington Post el escote no es nada del otro mundo.

Como dicen por acá…….Washington Post……Get a Life!!!