Privatización llevó a desastre total en hospital miilitar

Un escándalo mayor se ha desatado en Washington desde hace unos días en que el Washington Post denunció las condiciones deplorables en que viven los soldados heridos en la guerra durante su rehabilitación en el Hospital Walter Reed de esta ciudad.

Según el Washington Post, el hospital Walter Reed de Washington, el mayor hospital militar de Estados Unidos, donde convalecen de sus heridas cientos de soldados que combatieron en las guerras de Irak y Afganistán, está infestado de ratas, cucarachas y moho.

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Como si ésto fuera poco, los soldados que requieren de atención ambulatoria tienen que navegar por docenas de trabas burocráticas y llenar montañas de papeles antes de ser aceptados dentro del sistema de atención médica.

El escándalo ha resultado ser una vergüenza muy grande…

…para el gobierno y para el ejército, y ha resultado en la destitución por el secretario de Defensa, Robert Gates, del secretario del Ejército, Francis J. Harvey, y del general encargado del hospital, George Weightman.

Esto ha hecho que en el Congreso se exija mayor información sobre lo que ocurre, y ha manchado la reputación de la que era una de las instituciones médicas más reconocidas del país.

Y ahora resulta que en su empeño por privatizar todo y darle contratos a sus amigos, Bu$hCo concedió un contrato por $120 millones y 5 años a una compañía de propiedad de un ex-empresario de Halliburton, la multinacional que el vice presidente Cheney dirigiera hace unos años, para realizar las labores de apoyo al hospital Walter Reed.

Según congresistas demócratas que planean investigar este escándalo, un memorandum preparado en setiembre del 2006 por oficiales del Walter Reed y dirigido a su director describe como la decisión de privatizar los servicios de apoyo al hospital habían causado un éxodo de personal de experiencia y altamente calificado. Esto habría puesto en peligro de fracasar a las operaciones básicas y a los servicios de atención al paciente del Hospital Walter Reed.

Una desgracia más de las muchas causadas por el peor presidente en la historia de los EEUU.

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